Prácticamente cada semana se pone de moda un nuevo alimento milagro, que debería ayudarte a quemar grasa como una moto, tener más energía que un niño hiperactivo y bajar el colesterol malo.
Además, por internet circulan miles de planes de alimentación con desayunos sanos, meriendas fit y postres light para perder kilos de más.
Algunos de estos súper alimentos realmente funcionan, siendo el açaí, la pitaya y la acerola los mejores ejemplos.
Sin embargo, muchas de las declaraciones encontradas en los envases de los productos saludables no son nada más que trucos de marketing con el único objetivo de atraer ventas.
No solamente que no cumplen con su promesa, sino que incluso pueden tener efectos negativos en la salud.
Entonces, ¿qué alimentos no deberían formar parte de una dieta saludable? Aquí te presentamos 5 alimentos supuestamente «saludables» y sus mejores alternativas.
Zumos naturales de fruta
El zumo de naranja recién exprimido es uno de los ingredientes principales de un desayuno fitness.
Si la naranja es rica en vitamina C y otros antioxidantes, lo mismo será cierto sobre su zumo, ¿no? Solo que no.
Al exprimir la fruta, se pierde toda su fibra y nos quedamos solamente con su agua mezclada con una concentrada dosis de fructosa.
Esta misma fructosa se encuentra en la fruta entera, pero ahí viene acompañada por su fibra tan beneficiosa, que ayuda a ralentizar la absorción de azúcar en la sangre.
De esta forma, se evitan picos repentinos de azúcar y la hipoglucemia, lo que no se puede decir si ingerimos solamente el zumo de fruta.
Además, al ser líquido, es mucho más fácil consumirlo en exceso. Un vaso de zumo contiene hasta 4 naranjas, que seguramente no consumirías enteras, ¿verdad?
Alternativa saludable al zumo de fruta
Antes que tomar zumo de naranja, manzana, piña o granada, es mejor optar por las mismas frutas enteras.
No solo te brindan muchos antioxidantes, vitaminas y minerales, sino que también son ricas en fibra. Y este tipo de hidrato de carbono saludable es clave para mantener el equilibrio de la flora intestinal y disfrutar de una buena digestión.
Pero si te apetece tomar algo líquido, una buena alternativa sería preparar un batido de frutas y verduras.
De esta forma, su fibra no se tira, sino que sigue mezclada con la pulpa y el zumo de las frutas. Para hacer un delicioso smoothie saludable, incluye:
- 1-2 piezas de fruta (por ejemplo plátano, arándanos, fresas, papaya o piña).
- 1-2 puñados de verduras (por ejemplo espinacas, kale, apio o pepino).
- 1 cucharada de especias (canela, cacao puro, cúrcuma o jengibre).
- un vaso de agua, leche o bebida vegetal (opcional, si te gustan los batidos más líquidos).
- 1 cucharada de batido de proteínas sin azúcar (opcional, si quieres incrementar tu ingesta de proteínas para adelgazar o aumentar tu masa muscular).
Granola comprada
¿La granola es la alternativa saludable para el desayuno a las galletas o los croissants de chocolate? Lamentablemente no necesariamente.
De hecho, la granola que encontramos en el supermercado está llena de azúcares (hasta el 25%), edulcorantes artificiales y grasas altamente inflamatorias (por ejemplo aceite refinado de girasol).
¿No te ha pasado salir en búsqueda de una merienda después de un par de horas tras haber desayunado muesli?
Eso se debe a sus calorías vacías. Nos dan energía en el momento, pero no nos mantienen saciados durante mucho tiempo, al no proveer nuestro cuerpo con nutrientes esenciales.
Alternativa saludable a la granola industrial
Si te apetece empezar el día con un sabor dulce y crujiente, lo mejor es hacer tu propia granola casera.
Es muy fácil y puedes preparar una cantidad grande a la vez y mantenerla en la nevera toda la semana.
Para ello, mezcla:
- 200g copos de avena.
- 50 gramos frutos secos picados (nueces, almendras, avellanas, anacardos).
- 30g semillas (chía, lino, girasol, calabaza, sésamo).
- el puré de 2 manzanas (batirlas con un poco de agua).
- 2 cucharadas de eritritol o pasta de dátiles (dejar dátiles en remojo y batirlas).
Distribuye el muesli en una bandeja, sobre una hoja de papel vegetal, y mételo 10 minutos en el horno precalentado a 220 grados, o hasta obtener el grado de crujiente deseado.
La puedes comer con yogur natural, leche o bebida vegetal y una pieza de fruta de temporada.
Surimi, gulas o anguriñas
El surimi y sus derivados son muy populares en ensaladas de verano o cenas ligeras, gracias a que su preparación es fácil y rápida.
Además, al ser un plato con pescado, se supone que tiene los mismos beneficios que el pescado blanco y azul. Es decir, es rico en ácidos grasos esenciales Omega 3, en las vitaminas B9 y B12 y en proteínas de alta calidad.
Sin embargo, para producir el surimi, el pescado ha pasado por un largo proceso de fabricación.
No solamente ha sido molido en una pasta gelatinosa y sometido a presiones muy altas para ser prensado en bloques, sino que también se le añaden varios aditivos poco saludables.
Desde azúcares, gomas, aceites vegetales y almidón modificado, hasta aromas, colorantes artificiales y potenciadores de sabor.
El producto final contiene más otras sustancias que pescado y es uno de los alimentos más procesados que hay.
¿Qué comer en vez de surimi y gulas?
Si te preocupa tu salud, lo mejor que puedes hacer es optar por alimentos mínimamente procesados.
Aquí no se trata solamente de adelgazar sano, sino de mantener tus células sanas y jóvenes, para vivir más y mejor.
Te recomiendo reemplazar el surimi y sus derivados por pescado de verdad, idealmente de pincho o salvaje.
Opta por peces de proximidad, como dorada, lubina, merluza, arenque o salmonetes, acompañados de ensaladas o verduras.
El método de cocción también juega un papel importante. Procura preparar el pescado al horno, al vapor o a la plancha y evita los fritos, empanados y rebozados.
Jamón York o pechuga de pavo
Muchas personas optan por desayunar o merendar una tostada con jamón york o pavo, pensando que es una comida saludable, rica en proteínas.
Sin embargo, los embutidos y fiambres son unos alimentos muy procesados, cuyo contenido de carne suele ser menor del 50%.
La otra mitad está compuesta por ingredientes como azúcar, dextrosa, estabilizantes, aromas, colorantes, potenciadores de sabor y conservantes cuyo nombre no se puede ni pronunciar.
No me tomes la palabra, sino que comprueba por ti mismo, leyendo el listado de ingredientes de los productos cárnicos.
¡Y eso no es todo! No se trata solamente de los aditivos nocivos, sino también del amplio proceso por el cual ha pasado la carne para llegar a tener la forma de una loncha.
A lo largo de este proceso, la carne pierde gran parte de sus sustancias beneficiosas, como vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales.
Cómo hacer un bocadillo saludable
En caso de querer preparar un bocadillo de pollo, pavo o cerdo, opta por un trozo de carne fresca a la plancha, en vez del embutido.
Si no te da tiempo a cocinarla en el momento, deja varias pechugas de pollo preparadas en la nevera y ve sacándolas cuando necesites.
Siempre cuando puedas, escoge carne de pasto y pollo de corral, ya que es más rica en nutrientes beneficiosos.
Además, un bocadillo saludable contiene pan integral en vez de blanco e incluye también vegetales, como por ejemplo lechuga, pepino o tomates.
Snacks saludables o dietéticos
Los snacks salados como los chips de verduras y garbanzos o las galletas de arroz se consideran una merienda saludable entre comidas.
Sin embargo, muchas de las marcas compradas en el supermercado tienen un alto contenido de grasas trans, sodio y aditivos artificiales.
Además, aunque se trata de meriendas saladas, estas también contienen azúcar, ya que este actúa sobre los centros del placer de nuestro cerebro y nos lo pone imposible parar de comer.
Así que no te dejes llevar por envases atractivos con titulares como “vegano”, “light” o “con espirulina”, para elegir falsos productos saludables.
En vez, comprueba la lista de ingredientes para identificar posibles aditivos nocivos.
Snacks sanos que no engordan
Cuando te entran las ganas de algo salado y crujiente, lo mejor es preparar tu propia merienda saludable en casa.
Una opción que me encanta son los chips caseros de zanahorias, boniato, nabo o remolacha.
Para prepararlos, simplemente corta los vegetales en la forma deseada y mételos 10-15 en el horno precalentado a 220 grados.
Otra alternativa son los garbanzos asados o las semillas de calabaza tostadas.
Conclusión sobre los falsos alimentos saludables y sus mejores alternativas
En lugar de alimentos procesados llenos de edulcorantes artificiales como aspartamo o sucralosa, conservantes, aromas y colorantes, elige alimentos frescos e integrales.
Estos son ricos en nutrientes beneficiosos como aminoácidos esenciales, grasas saludables, fibra y antioxidantes.
No pasa nada por elegir algún alimento procesado de vez en cuando, pero intenta basar tu dieta en frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos, pescado y carne fresca.
Nos encantaría ver tu próximo plato saludable, así que no dudes en compartirlo con nosotros en Instagram.
¿Necesitas inspiración para preparar sencillas pero deliciosas recetas antiedad? ¡No te pierdas nuestro canal de YouTube!
¿Quieres vivir tu mejor día cada día?
Mejora tu relación con la comida para verte y sentirte bien gracias a nuestro exclusivo Asesoramiento Nutricional Personalizado.
¿Piel flácida, con arrugas y manchas? ¡Eso es cosa del pasado!
Encuentra las mejores soluciones con nuestro buscador de cuidado facial Skincare Finder. ¡Es gratis!
¿Buscas mejorar tu estilo de vida?
Suscríbete a nuestra newsletter de salud y bienestar
10% de descuento
Recibe un 10% de descuento en tu primer pedido y nuestros consejos para mejorar tu estilo de vida al suscribirte a nuestra Newsletter.
NOTA DE TRANSPARENCIA: En ocasiones incluimos productos que creemos que son útiles para nuestros lectores. Si compras a través de los enlaces que añadimos, es posible que ganemos una pequeña comisión. Este es nuestro proceso.
