Las discusiones sobre el síndrome del intestino permeable son un tema bastante nuevo, pero en auge, especialmente entre los profesionales de la salud alternativa.
Aunque la medicina tradicional aún no lo reconoce como una condición “real”, cada vez más evidencia científica demuestra su posible implicación en varias enfermedades.
De todas formas, una cosa es segura: gran parte de nuestro sistema inmunológico reside en el intestino, actuando como un escudo protector frente al mundo externo.
Por lo tanto, la salud intestinal está directamente correlacionada con la salud general y tiene sentido estudiar este tema en profundidad para descubrir posibles causas subyacentes para varios problemas de salud.
Por eso, en el artículo de hoy, te contamos qué es el intestino permeable, cuáles son sus síntomas y posibles efectos, así como tratamientos.
Pero antes, ¿has escuchado alguna vez que el intestino es el segundo cerebro?
¿Por qué el intestino es considerado el segundo cerebro?
Todos conocemos el sistema nervioso central del cuerpo, que está formado por el cerebro y la médula espinal.
Su misión es establecer una comunicación directa entre el cerebro y todos los órganos del cuerpo. Para ello, emplea una red de nervios, neuronas y neurotransmisores.
Pero también hay una parte menos conocida del sistema nervioso, ubicada en nuestro intestino: el sistema nervioso entérico.
Este consiste de más de 100 millones de células nerviosas que recubren todo el tracto gastrointestinal desde el esófago hasta el recto. Su misión principal es controlar la digestión.
Debido a que depende del mismo tipo de neuronas y neurotransmisores que se encuentran en el sistema nervioso central, el intestino es llamado nuestro «segundo cerebro«.
Es más, hay una conexión directa entre este «segundo cerebro» y el cerebro en nuestra cabeza, conocida como “eje intestino cerebro”.
Aunque el sistema nervioso entérico no puede “pensar”, sí que está comunicándose continuamente con el cerebro “principal” a través del nervio vago.
Y la parte interesante es que la evidencia apunta a que el segundo cerebro puede influir en nuestras decisiones, estado anímico y bienestar, así como enfermedad.
¿Qué es el intestino permeable?
Además de digerir la comida y absorber los nutrientes, el tracto digestivo también juega un papel en prevenir que sustancias nocivas entren en nuestro cuerpo.
Para ello, la pared intestinal está formada por miles de pequeñas uniones estrechas, cuyo objetivo es dejar pasar el agua y los nutrientes al torrente sanguíneo mientras mantienen los patógenos en su interior.
Pero, cuando estas uniones se aflojan, hablamos de un intestino permeable. Es en este momento que las bacterias, toxinas y partículas de alimentos pueden pasar del intestino al torrente sanguíneo.
Eso puede conllevar a una alta inflamación, así como cambios en la microbiota intestinal, lo que, en su turno, puede desencadenar varios problemas de salud.
¿Cuáles son sus síntomas?
Si te preguntas ¿cómo puedo saber si tengo el intestino permeable?, presta atención si tienes uno o varios de los siguientes síntomas:
- Problemas digestivos como diarrea crónica, estreñimiento o hinchazón
- Fatiga
- Sensibilidad e intolerancia repentina a ciertos alimentos
- Problemas de la piel como acné, erupciones o eccema
- Dolores de cabeza
- Dolores en las articulaciones
- Deficiencias nutricionales
- Confusión y dificultad para concentrarse
Ya que todos estos síntomas pueden ser causados también por otros factores, consulta a tu médico especialista para encontrar la causa subyacente en tu caso.
¿Qué consecuencias tiene?
Aunque aún no se han hecho suficientes estudios científicos para demostrar una relación inequívoca entre el síndrome del intestino permeable y varias enfermedades, sí que hay evidencia que apunta a que puede contribuir a:
- Enfermedad de Crohn y celíaca
- Diabetes tipo 1
- Enfermedad crónica del hígado
- Síndrome de Ovario poliquístico
- Alergias alimentarias
- Fibromialgia
- Artritis
- Asma
- Migrañas
- Esclerosis múltiple
Además, teniendo en cuenta el eje intestino-cerebro, es posible que el intestino permeable contribuya a las condiciones de salud mental, como la ansiedad y la depresión.
No obstante, a día de hoy, no es seguro si estas enfermedades son una causa o una consecuencia del síndrome del intestino permeable.
¿Cuáles son las causas del síndrome del intestino permeable?
A pesar de que los investigadores no saben aún exactamente lo que causa esta condición, sí que han descubierto un vínculo entre la permeabilidad y la zonulina.
Esta es una proteína descubierta en el año 2000, que regula la apertura de las uniones en la pared intestinal.
Es interesante que la liberación de zonulina es desencadenada por el gluten – una proteína encontrada en cereales como trigo, centeno, cebada y espelta.
No obstante, eso no significa que el consumo de gluten lleva automáticamente al síndrome del intestino permeable, sino que parece que solamente lo empeora en personas celíacas.
Otros factores que pueden contribuir a una mayor permeabilidad del intestino son:
- Llevar una alimentación rica en comida procesada, azúcar refinada y fructosa
- El consumo excesivo de alcohol
- Las deficiencias nutricionales, especialmente en vitamina A, D y zinc
- Los niveles elevados de estrés
- El uso a largo plazo de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como ibuprofeno
- Un desequilibrio de la flora intestinal
¿Cuál es el mejor tratamiento natural para la permeabilidad intestinal?
Teniendo en cuenta los aspectos que pueden provocar y empeorar el intestino permeable, podemos deducir que para curarlo o mejorarlo, hay que:
- Limitar el consumo de alimentos procesados y del azúcar, ya que este alimenta a las bacterias dañinas.
- Limitar el consumo de alcohol a máximo una copa de vino o cerveza al día.
- Incluir una gran variedad de verduras y frutas frescas, así como semillas, frutos secos y especias para ingerir micronutrientes esenciales y evitar las deficiencias nutricionales.
- Aprender a manejar el estrés gracias a un cambio de la mentalidad. Además, involucrarse en actividades relajantes como meditación, yoga, aromaterapia, pasear en la naturaleza, masaje, escuchar música o jugar con mascotas.
- Evitar el uso excesivo de medicamentos.
- Comer alimentos fermentados como miso, kéfir, kombucha, yogur natural, kimchi y chucrut. Estos contienen excelentes probióticos que ayudan a equilibrar la flora intestinal.
- Ingerir alimentos ricos en fibra. Por ejemplo cereales integrales como quinoa y teff, legumbres, fruta y verdura de temporada. La fibra tiene un rol prebiótico, nutriendo a las bacterias beneficiosas en el intestino.
- Tomar suplementos con probióticos como éste para restaurar la microbiota intestinal.
¿Qué puedo comer con el intestino permeable?
Como hemos mencionado antes, lo más importante a la hora de establecer una dieta para el síndrome del intestino permeable es basar su alimentación en productos frescos, mínimamente procesados, preferiblemente locales y de temporada.
De esta forma, nos aseguramos de nutrir a nuestras células con las vitaminas y los minerales que necesitan para ejecutar sus funciones de manera correcta.
Es más, optar por alimentos ricos en pre y probióticos es fundamental para mantener a las bacterias beneficiosas en el intestino contentas y prósperas.
A continuación, te facilitamos una tabla de alimentos recomendados:
- Verduras como col rizada, brócoli, espárragos, calabacín, pimientos, zanahorias o setas.
- Frutas como fresas, arándanos, açaí, manzana, aguacate, plátano, kiwi, acerola, melón y albaricoques.
- Cereales integrales como quinoa, teff, avena, arroz integral y amaranto.
- Alimentos fermentados como miso, kéfir, kombucha, yogur natural, kimchi y chucrut.
- Legumbres como garbanzos, lentejas, judías y guisantes
- Carne de pasto
- Marisco y pescado salvaje
- Huevos ecológicos o camperos
- Aceite de oliva virgen extra
- Semillas de chía, cáñamo, linaza, girasol y calabaza.
- Frutos secos como pistachos, avellanas, almendras y nueces de California, Brasil y Macadamia.
- Alimentos ricos en almidón resistente como patata, boniato y avena.
Mencionamos que esta lista no es completa y debe entenderse solo como pauta orientativa.
¿Qué no puedo comer?: Alimentos prohibidos
No nos gusta ser drásticos y recomendar la eliminación completa de algunos alimentos. Pero, teniendo en cuenta que ciertas sustancias pueden empeorar las enfermedades intestinales, te presentamos la siguiente lista de alimentos a evitar.
- Comida procesada: como productos de bollería y pastelería industrial, chocolate, chuches, pizza congelada, patatas fritas y otros snacks envasados.
- Alimentos con alto contenido de fructosa: como miel, jarabe de maíz, sirope de agave, zumos de fruta, refrescos o salsas industriales.
- Productos elaborados a base de harinas refinadas: especialmente con gluten: pan blanco, pasta, pizza, picos.
¿Cuál es el mejor suplemento para el intestino permeable?
Ya hemos visto antes que los suplementos con probióticos pueden ayudar a mejorar la salud intestinal, al restablecer la flora bacteriana.
Por ejemplo, un estudio concluyó que la suplementación con Lactobacillus llevó a una disminución significativa en la frecuencia de los síntomas gastrointestinales.
De todas las cápsulas que hemos probado, en nuestra opinión, el mejor suplemento probiótico con Lactobacillus, que contiene 2000 millones de estas bacterias es éste.
A parte de eso, los suplementos con probióticos mejores valorados en Amazon son:
A parte de probióticos, es importante asegurarse de ingerir todas las vitaminas y los minerales en la dosis diaria recomendada.
Si no lo logras a través de la dieta (por ejemplo porque no comes apenas verduras), deberías plantearte tomar un complejo multivitamínico, como éste.
Conclusión
En conclusión, el síndrome del intestino permeable ocurre como consecuencia de la separación entre las uniones de la pared intestinal.
Eso conlleva a que las bacterias y toxinas que deberían permanecer dentro puedan escaparse y entrar en el torrente sanguíneo.
Aunque los médicos no tienen aún la respuesta exacta en cuanto a sus causas y consecuencias, lo que sí sabemos es que cuidar la microbiota intestinal es definitivamente importante para prevenir, mejorar y hasta curar la permeabilidad intestinal.
Además, el mejor remedio casero es comer a diario una multitud de alimentos frescos, ricos en pre y probióticos, como verduras, frutas y productos fermentados.
Si sufres molestias abdominales como hinchazón o estreñimiento, te animamos a leer también este artículo sobre la dieta FODMAP.
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